RESOLUCIONES PARA 2014 EN MATERIA DE INMIGRACIÓN

Resoluciones para 2014 en materia de inmigración

Justo ahora que empezamos nuevo año y dispuestos a fijarnos resoluciones personales o familares, Nelson A. Castillo, abogado de inmigración en Estados Unidos escribió excelente un artículo con resoluciones migratorias para 2014. No podría estar más de acuerdo con sus ocho propuestas prácticas dirigidas a las personas que migran y que invita a hacer las cosas bien, de la manera más correcta posible. Estas propuestas bien se pueden trasladar a cualquier país o entorno migratorio.

Entre algunas de ellas recomienda (tomo la libertad de agregar mis comentarios y aportaciones):

"No visitar a notarios públicos, consultores de inmigración, llena papeles o multi-servicios para obtener asesoría legal migratoria."

Efectivamente. Siempre es más acertado buscar consejo en materia de inmigración con profesionales preparados e instituciones reconocidas en lugar de dejarse llevar por aquello de "me ha dicho un amigo..."

"Hacerse ciudadano estadounidense" (o de cualquier otro país).

Aquí el concepto de ciudadanía que él usa está más bien ligado a tramitar la nacionalidad -o por lo menos un estatus legal estable- en el país de destino. Aún si se ha llegado con un estatus migratorio irregular, nunca se debe quedar estancado, sino buscar por todas las maneras posibles ser una persona de plenos derechos reconocidos legalmente. A partir de ahí continuar trabajando cada día por construir ciudadanía, por ejemplo ser un vecino confiable, amigable, dar a conocer, compartir e intercambiar toda aquella experiencia cultural con la comunidad donde se inserta, aún si la migración es temporal.

"Ayudar a familiares a emigrar a los Estados Unidos."

Cuando se logran esos derechos, usarlos, protegerlos, defenderlos y reivindicarlos sin temor. Uno de estos derechos puede ser por supuesto la unificación de la familia.

"Mantener la mejor conducta moral."

Más que una conducta moral (¿quién va a decir qué es la "mejor moralidad"?), yo propongo mantener una conducta cívica ejemplar, especialmente por la carga negativa que tiene ser llamado "inmigrante" como si el hecho de mudarse de país fuera motivo para ser menos valorado que cualquier otra persona. Muchos discursos políticos extremistas apoyados por medios de comunicación afines se centran en avivar esa carga negativa que logran calar en la sociedad sobre todo cuando se ven casos relacionados con ilegalidades o delincuencia. Demostrar con la conducta y los hechos que los estereotipos de las migraciones son falsos e infundados.

"Hacer impuestos."

Todo inmigrante, cualquiera que sea su situación legal de estancia en el país de destino paga a diario impuestos desde sus gastos de alimentación o vivienda hasta el envío de remesas a sus familias, incluso el doble porque su familia también paga impuestos en origen con esas remesas. Los números no mienten. A pesar de los discursos anti inmigración, la población migrante contribuye a sostener los estados de bienestar no solo de los países de destino sino también de origen, y por mucho. Por ello, a nivel personal o familiar, tener todo en regla respecto a la declaración de impuestos no solo contribuirá a una buena trayectoria sino también a deshacer con hechos la percepción que algunos tienen sobre la inmigración.

Además de las propuestas dirigidas principalmente a las personas que migran, a continuación hago otras propuestas de resoluciones para 2014 en materia de inmigración dirigidas a quienes tienen cerca a personas de otro país, pues no existe una verdadera integración sin el acercamiento de ambas partes. Por tanto:

• Evite creer los discursos negativos sobre las migraciones

Vivimos en un mundo en el que los medios de comunicación masivos contribuyen a reforzar estereotipos negativos sobre las migraciones. A menudo escuchamos palabras como "invasión", "avalancha", "abusar", "despojar", "delincuencia" y cientos más. Nada más alejado de la realidad. Los números y hechos dicen que los movimientos migratorios siempre contribuyen a la sostenibilidad de las sociedades de origen y destino en todos los aspectos sociales, económicos o políticos aún cuando a esta población tiene impuesta mucha carga negativa. Pero a algunos sectores no les conviene dar a conocer estos hechos y datos debido a sus propios intereses. Es verdad que a veces hay casos de ilegalidad, delincuencia o criminalidad, pero esto no es automáticamente "inherente" a las migraciones.

• Conozca personalmente a las familias inmigrantes

¿Cuántas veces se encuentra  en su vida cotidiana con una persona o familia inmigrante? ¿Por qué no toma la iniciativa de acercarse y conocer personalmente quién es, cómo es, de dónde viene, etc? ¿Por qué no tener una actitud proactiva y abierta para permitir en su círculo social a personas de otro pais? ¿Qué le detiene? Hágalo. ¡Pronto descubrirá que tiene muchas más cosas en común de las que pensaba!

• Ayúdeles a integrarse socialmente

Cuando una persona o familia ha migrado a otro país, generalmente está confusa, desinformada, desconoce en gran medida la cultura, costumbres, herramientas y recursos que pueden serle útiles, sin contar el duelo que tienen por haberse separado de sus familias o comunidad de origen y el llamado choque cultural inevitable. Por ello le invito a ayudarles a transitar este camino de la mejor manera posible pues ¿quién conoce mejor su propia comunidad que usted? Créame, cualquier apoyo o información por mínima que sea, será de gran ayuda para estas familias.

• Luchen juntos por sus derechos compartidos

Como decía anteriormente, es fácil escuchar discursos y palabras de rechazo a las migraciones. Este tipo de discursos solo tienen el objetivo de infundir temor en la población autóctona, de dividir a la población, de echar la culpa de la situación social, económica o política a unos y otros. "Los inmigrantes son los culpables de que nuestra economía vaya mal, nos quitan el trabajo, los salarios, nuestros bienes por los que hemos luchado", "los inmigrantes son los culpables de que el sistema de bienestar sea débil", "los inmigrantes son los culpables de que la delincuencia sea alta" y expresiones similares. Nada más alejado de la realidad.

Reflexione, ¿quién en realidad es responsable de las crisis económicas de nuestro tiempo? ¿quién en realidad toma decisiones arbitrarias para favorecer a grupos de poder reducidos? ¿quién toma decisiones y es responsable de bajar salarios, de precarizar las condiciones de trabajo? ¿quién explota a quién? ¿quién toma decisiones y es responsable de recortar o quitar derechos y libertades conseguidos con mucho esfuerzo? La exhortación es clara: no se deje manipular, más bien luchen juntos por los derechos compartidos como clase trabajadora, como sociedad maltratada.

• Intercambie cultura, construya ciudadanía

Conocer a personas de diferentes nacionalidades es muy enriquecedor para ambas partes. No solo le ayuda a conocer cómo viven y piensan en otros países sino también la ayudará a conocerse a sí mismo y a su sociedad a través de la mirada del otro. No se trata de algo meramente folclórico, tampoco de un enfoque paternalista. Se trata más bien de verse entre iguales. De compartir e intercambiar experiencias, pensamientos, filosofías, formas de pensar y ver la vida. De compartir e intercambiar experiencias y estrategias de vida que no había considerado y, a partir de ellas, construir ciudadanía. Una ciudadanía no anclada en el pasado sino propia del siglo XXI y acorde a los tiempos que vivimos. Una ciudadanía que sirva como amalgama, resistencia y protección contra los conflictos extremistas que vemos hoy. Una ciudadanía que sirva como puente y unión entre origen y destino. ¿No cree que merece la pena intentarlo?