LA MOVILIDAD DE LAS MIGRACIONES

A pesar de que las migraciones, especialmente provenientes de África subsahariana, siguen siendo foco de atención de los diarios españoles, que las presentan en términos de "asalto masivo", "asalto violento" de las fronteras españolas por algunas decenas de inmigrantes fuertemente equipados con potentes armas de asalto como piedras y palos, hoy hemos conocido otro dato interesante para contrastar con ese planteamiento: la cifra de extranjeros que deja España se ha multiplicado por 12 en tan solo un año, alcanzando la cifra de 200,000 personas menos (sin contar con quienes no están registrados).

De acuerdo a la información publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la caída de la población foránea es general en toda España. Solo una comunidad, Aragón, presenta un saldo positivo con 542 extranjeros más. Entre el resto de regiones y teniendo en cuenta los datos brutos, destacan las caídas de Madrid, con 90.933 personas menos, Cataluña (-28.307), Comunidad Valenciana (-19.121), Baleares (-18.164) y Andalucía (-17.385). La Comunidad de Madrid es la que, porcentualmente, presenta una bajada mayor: el 8,95%.

Por cierto, el estudio Proyección de la Población de España 2013-2023, (PDF) publicado por el INE el pasado noviembre, prevé que España pierda en los próximos 10 años 2,6 millones de habitantes. Pero más allá de las cifras, lo que ponen de manifiesto todo estos datos es una de las características de los movimientos migratorios que infinidad de estudios sociales vienen dando a conocer, y es la movilidad de las migraciones (como ejemplo ver el estudio "Capital humano, migraciones y movilidad espacial de la población" (PDF) realizado por la Fundación Bancaja). Frente a la visión limitada de que las migraciones se dedican a "invadir masivamente" países, lo cierto es que estos movimientos vienen, van, cambian de dirección. Ayer España era un país receptor de inmigración, hoy día es un país expulsor de emigrantes.

Comprender los procesos migratorios desde una perspectiva global ciertamente da una visión más completa a la hora de pensar en cómo abordar o gestionar mejor y positivamente las migraciones, y también nos ayuda a entender el por qué medidas restrictivas que solo buscan frenarlas suelen caer en el fracaso, además de causar víctimas mortales y sufrimiento a las personas que migran para conseguir algo que ofrecer a sus familias.